23.2.10

Osvaldo "Gitano" Rodríguez


Valparaíso 1943–Bordolino, Italia 1996. Estudió arte y arquitectura en su ciudad natal. En París se doctoró en literatura, ejerciendo la docencia en prestigiosas universidades. Fue poeta, cantautor y dibujante, también uno de los fundadores de la llamada “Nueva Canción Chilena”. Famosísimo es su vals “Valparaíso”, poema escrito en 1962 y musicalizado en 1968. Tras el golpe de estado que derrocó el gobierno de la Unidad Popular partió al exilio, lo que lo llevó a peregrinar por distintos países como Francia, España, Checoslovaquia, Cuba, Alemania Federal y Democrática para finalmente radicarse en Bordolino, Italia, una localidad cercana a la ciudad de Verona. En 1989 visitó Chile y volvió a hacerlo en 1995 con la intención de regresar definitivamente, pero no pudo encontrar estabilidad laboral y debió retornar a un “exilio” impuesto, esta vez, por la indolencia de las autoridades “democráticas” que nuevamente comenzaban a gobernar el país. El 17 de marzo de 1996, a los 53 años, Osvaldo “Gitano” Rodríguez murió en Italia aquejado por una enfermedad incurable. Sus funerales se realizaron el 12 de mayo en Valparaíso ante una concurrencia de miles de personas que aplaudían el paso del cortejo en su recorrido por las calles del puerto. Además de su producción discográfica, publicó libros de poemas y cuentos: “Estado de emergencia” 1973; “Diario del doble exilio” 1975; “Escrito en Niza” 1979; “Cantores que reflexionan” 1984; “La nueva canción chilena” 1986; “Berlín y los recuerdo” 1989; “Con sus ojos de extraño mirar” 1989; “Canto de extramuros”, 1994; “Contrapunto de amor” 1990; “Casitango”, en la revista Libertad 250, de la Sech de Viña del Mar. Parcialmente publicó “101 canciones de amor y cuatro sonetos de olvido”. También realizó algunas exposiciones con sus pinturas y dibujos.


VALPARAÍSO

Yo no he sabido nunca de su historia,
un día nací allí sencillamente,
el viejo puerto vigilo mi infancia
con rostro de fría indiferencia,
porque no nací pobre y siempre tuve
un miedo inconcebible a la pobreza.

Yo les quiero contar lo que he observado
para que nos vayamos conociendo
el habitante encadenó las calles;
la lluvia destiñó las escaleras,
un manto de tristeza fue cubriendo
los cerros con sus calles y sus niños.

Y vino el temporal y la llovizna
con su carga de arena y desperdicio,
por ahí paso la muerte tantas veces,
la muerte que enlutó a Valparaíso
y una vez más el viento como siempre,
limpió la cara de este puerto herido.

Pero este puerto amarra como el hambre,
no se puede vivir sin conocerlo,
no se puede dejar sin que nos falten,
la brea, el viento sur, los volantines,
el pescador de jaibas que entristece
nuestro paisaje de la costanera.


***

I
Aquellas flores blancas
que se las lleva el viento
desde los miradores de Valparaíso
¿Son acaso las mismas que observaban mi muerte,
cuando yo estaba muerto,
cuando jugábamos a que eso era el naufragio?

¿Qué corona de musgos fue la que me ofreciste
tendida con los ojos abiertos en la arena
muriéndote de frío,
pensando en mi cintura?

Vendrá el viento del mar a existir en la playa,
habrán muerto las flores,
el musgo será un vago recuerdo de las piedras.

¿Naufragará la noche todavía,
la torpe noche como monstruo bobo,
sin direcciones ni cabezas,
ahogándose de soldedad y frío
sobre la arena de Valparaíso?

II
¿Dónde, dónde en el otoño
cayeron como gotas
amatgamente hacia mí mismo,
lentos segundos, caminatas
de un lejano país al que incansable vuelvo?

¿Por qué en la mitad de esta estación, a veces,
en un pálido espejo
asoma aquella arquitectura?

¿Qué misterioso signo
que acaso conmigo viene desde siempre
manifiestan la luna o la neblina?

III
Tiene la edad inmóvil de las fotografías
y flota en el viento de Valparaíso.
Mujer desintegrada en tantas cosas
me llama día a día y viene a mi recuerdo
entre un aroma áspero de rocas
frente a ese mar que no se cansa de olvidarla.

IV
¿Conoces tú
el aire que desparrama alrededor
la sombra en los chahuales?

En la tierra de Reñaca
el viento baja por las escaleras
hasta gemir encima del coirón.

Las lágrimas de sal
tiritan sobre el eucaliptus.

Como las dunas no quieren recordar
cambian su forma día a día
para borrar tus pasos.

V
No sólo por recordar te recuerdo
Tierra
bajo esta lluvia de agosto
opuesta página de verano y luz.

Tocaría con mi corazón mojado
algo del suelo que arde,
el viento y la gaviota
porque vivo cada día
alimentado sólo de estas sílabas.

EL ESPEJO DE LOS DIOSES

Cuando llegaste al mundo
y abriste los ojos aún sin ver
bajo la noche húmeda de Praga.
Cuando tú dabas tus primeros pasos
y te asomabas al arcoiris dulce de tu alma
yo andaba enamorando el aire,
trazando un mapa de pájaros y arañas
en esa tierra donde se pierde el ojo
en horizontes como un abismo de agua.
Tábanos, avispas en un verano seco como un cardo,
aroma de las flores, las simprevivas que están raspando el aire.
Cuando aprendiste a deletrear tu idioma de cristal
como una fuente de agua
y comenzaba a deslumbrar el aire
de los molinos en el Parque de Kampa,
yo aprendía el canto de la tórtola,
la voz de las zarzamoras,
gritaba en un idioma de indios
frente a la mar que quiere devorarte.
Tierra, horizonte, juguete del cristal del terremoto,
huye, élitro, al viento espeso cuarteado por las sales.
Cuando en el rostro te floreció la boca
como fruta de amores o pétalo de miel
y florecías, tu cuerpo entraba al mundo,
tus manos dibujaban los signos del encuentro.
Yo andaba entre banderas acumuladas amor,
mi pueblo en la miseria y flor del mundo
por eso campesina, yo sin tierra ni horizonte,
sí el aire del mar o la montaña.
Canto, canto, te enseño mi país que aún no conozco.
Pueblo, nieve, el lago como espejo de los dioses.


PRESAGIO

Un día te levantarás y no amanecerá,
querrás cantar y no recordarás palabra.
Esa mañana el sol saldrá de pronto
y alguien me nombrará en Valparaíso.

Oirás a la distancia un ruido de ascensores,
los aplausos de un teatro
y la palabra adiós se quedará
pegada a tu memoria como una cosa muerta.

Será un día muy largo, no sé si en el otoño,
pero el viento vendrá con otro rostro
y las gentes se mirarán como asustadas.

Cuando mi último aliento se me vaya,
sentirás que te llama y abrirás esa puerta.

Nadie habrá nadie, sólo el viento
con la misma mirada amarilla de miedo.

VISIÓN DE VALPARAÍSO

Sobre la fría muralla
que yo pinté de blanco
veo Valparaíso.
Encajonando el Pacífico hacia el sur,
islas de agua sobre un mar celeste
por donde un navío de palabras
aún no acaba de fondear.

Gaviotas limitan el olvido hacia el norte,
mientras al sur
la palabra de mi infancia
pareciera que todo lo resume.

Veo latas
en el abismo cortado entre dos cerros,
viento sobre las velas que un día desplegué.

Torres de iglesias que quizás hoy venero
no por el culto de lo desconocido
sino por el deseo un día
de verlas emerger del horizonte
sin el acero que las cerca
ni los alambres que las castigaron.

Tú sabes, ciudad
que te he andado buscando por el mundo
reconociendo vientos que te imitan,
acaso atardeceres o mares
o escaleras o piedras azules,
gastadas barandas de madera,
temblores de este solitario
que tanto y tanto viajó para encontrarte.


21.2.10

JORGE VELASQUEZ

Nace en Castro en 1972, vive en la isla de Quenac, Chiloé. Contador Auditor titulado en la Universidad de Los Lagos en Osorno ha formado parte de los talleres Literarios AUMEN y ARION ha sido publicado en numerosas revistas y diarios, tanto de Chile como del extranjero.
En 1995 publica junto al escritor Bernardo Colipán el libro Zonas de Emergencia POESÍA - CRITICA. Su obra ha sido antología en los libros:
- Antología Diez Años de talleres Literarios Región de Los Lagos 1979 - 1988.
- Quince Poetas desde el agua-Lluvia (Ediciones El Kultrun Valdivia 1993) José Teiquel.
- Desde Los Lagos Antología de Poesía Joven (Ediciones Polígono Pto. Montt 1993) Jorge Loncón.
- Poetas Chilenos Jóvenes, ANTOLOGIA (Ediciones LAR, Concepción)
- Poesía Chilena para el siglo XXI (DIBAM) Compiladores Floridor Pérez y Tomas Harris.
En el año 1992 obtiene el primer premio de poesía en la Feria de la Creatividad Juvenil de la Universidad de Chile Stgo. En 1996 el primer premio nacional e Internacional de Estudiantes Contadores Auditores en el primer Congreso Nacional e Internacional desarrollado en la ciudad de Iquique, con el ensayo "Vocación de la Profesión y/o Profesión de la Vocación". Actualmente participa en el taller Literario de la Universidad de los Lagos, y es invitado en forma permanente a los encuentros regionales de poesía.

__

RELATO DE MI SUEÑO A UNA BAYADERA DETRAS DE LA ESTUFA

Que no se quejen los durmientes
en el glaciar de la somnolencia
dos veces en el mismo sueño se lavaron
y epitafios colgaron del lacrado árbol que todos
comían
gélida es esta isla, laberíntica donde duermo,
mis ojos nunca vieron el sueño
en el mismísimo lugar que ellos lo plantaron
porque eterna fue nuestra cerca
eterno el deceso de la memoria.

Nunca vimos mas allá
de nuestro sueño
y no le abrimos la puerta a la muerte nunca
para que se sentara en los vestigios de los
ojos

Es esta mancha de pasto amarillo
la ilusión de nosotros corderos rojos
paseándonos, corriendo, gritando
en el sueño de no vivir.

"La jornada es de ninguna parte a ninguna
parte" como dice Sharif en una
película
donde el cielo es un perro sin ladrar
y en los ojos la basura es una estatua.


18.2.10

VANESSA DÍAZ MARIN

Antofagasta. Psicopedagoga y poetisa de la II región, quién también incursionó algunos años en el teatro y en la música, cantando y tocando instrumentos tales como la guitarra, el teclado y la percusión. Tuvo una activa participación en grupos musicales y obras teatrales de la región. Se presentó en obras del género dramático con narrativa y poesía, en diversos concursos literarios, entre los que se destacan los convocados por empresas mineras, por la caja de compensación Los Andes, entre otros. En todos ellos obtuvo el primer lugar e importantes premios a nivel regional y nacional. Ha realizado talleres literarios y de animación socio-cultural para adolescentes en riesgo social.

Cáncer de alma

La sangre que brotaba como espuma de mi corazón ardiente,
no la viste más,
¡porque yo me hice la valiente!
La quejumbrosa pesadilla de perderte a cada momento,
se hizo real corriendo el velo de mi locura.
Tus cabellos pegados en mi almohada
se fueron con el viento y mi cuerpo perdió toda cordura.
Llorando grité tu nombre.
Porque me habías abandonado,
te sentí mi Dios y, al no verte nunca más,
nació un violento demonio en mí…
Te odié.
Fui una hoja de otoño en primavera,
tratando de construir castillos sobre otros derribados.
Conté tantas estrellas en el cielo,
mientras trataba de olvidarte.
Subí a la que más brillaba
y, sentándome en una de sus puntas, me puse a cantar…
A capela…

Alma pútrida

Mi corazón se reventó en tus manos.
Quedaste llena de sangre y yo…
muerta en vida.
Mis ojos quedaron ciegos de fe,
me diste de beber tus lágrimas.
Agonizaron mis ojos un poco más…
Mi boca quedó abarrotada de besos rotos…
Tu boca hizo el luto…
Volé hacia la oscuridad,
la luz de mi pasado ya no era luz,
sólo era la sombra de un recuerdo fructuoso.
Quise volver, retomar la esperanza,
pero mis pies estaban ensangrentados de errores
y de caminos mal tomados por encontrar el rumbo.
Me diste la vida; pagué con la muerte.
Nos dimos el alma;
ahora lloran dos cuerpos inertes…
Sólo fuimos dos apasionadas ilusiones,
buscando en la inmensidad de la noche
un simple suburbio llamado amor…
Yo ya he muerto antes y te sigo queriendo…
Dime cuándo morirás…
Dime cuándo…

Madrigales febriles

Tu sabia en mi flor…
Tus dedos recorriendo mi tallo…
Tu lengua invadiendo mi alma,
tú, tú, tú me llenas toda.
Tus brazos rodeando mi espalda…
Tu ombligo bailando en mi vientre…
Tus labios cantando en mi cuello,
tú, tú, tú me llenas toda.
Tú sangre en mi sangre,
dos cuerpos sangrantes,
desnudos, enloquecidos…
¡Desbordantes!
Dos nubes empapadas de amor,
dos rosas floreciendo en la cama,
dos gemidos compenetrados en una misma historia…
¡Tú, tú, tú!... Me llenas toda.

Amor

Amor, palabra que convirtió mis ojos en nubes de invierno.
Amor, sentimiento penetrante castrador de almas.
Amor, poesía vivencial que mata y resucita.
Amor, postre del dolor, fuego que quema…
Amor, sentimiento embriagador de mentes.
Amor, convulsión que desangra el cuerpo,
haciéndonos desembarcarlo en otros como un profundo abismo.
Amor, palabra que todo lo puede y todo lo alcanza.
Vértigo que asota el espíritu y nos vuelve infantes.
Amor, plenitud del tiempo en destiempo.
Estremecimiento ardiente…
Amor.
Dos que aman un mismo destino.
Dos que sienten a Dios en un mismo universo.
Se hace verdadero cuando,
si termina, morimos…

Magia Sempiterna

¿Te imaginas tú y yo flotando en una taza de café sobre un pedazo de azúcar mal diluido?
¿Te imaginas tú y yo sentados sobre la luna, comiendo galletas de chocolate?
¿Te imaginas tú y yo durmiendo sobre el lomo de un perro como dos traviesas pulgas enamoradas?
¿Te imaginas tú y yo flotando por un río en un barquito de papel?
¿Te imaginas tú y yo sentados sobre el tejado como dos gatos en celo esperando a que salga la luna?
¿Te imaginas tú y yo juntos para siempre?
¿Te imaginas tú y yo bailando sobre el sol el ritmo de la Lambada?...
¿Te imaginas tú y yo superpuestos en un pastel de cumpleaños
como dos velitas chispeantes a punto de encenderse por el furor de cumplir una año más?
¿Te imaginas tú y yo, como el agua y el aceite, por fin siendo amigos?
¿Te imaginas tú y yo como el violín y su arco, componiendo una canción de amor?
¿Te imaginas tú y yo... juntos para siempre?

Beso

"Beso... roce de rosas rojas,
aguas que se mezclan,
juego que se torna fuego...
Beso... tus labios y los míos,
yo la rosa y tú el rocío...
Un beso más un beso,
son dos besos y un navío hacia tu lengua...
Beso... la conexión de dos universos...
Beso beso beso...
¡Sí!... Beso...
Tu silencio... y mi paz...
Mi furor y tu locura...
Un canto del alma...
¡Simplemente un beso!
refugiado...
en un simplemente verso...
Tu boca y la mía...
dos bocas estremecidas...
Te muerdo, lloras y sangras
me mojas, río y resurjo...
Beso... beso, beso...
¡Sí!... Beso...

Sadismo

Voy a ser la ramera que endulza tus noches,
hasta romperte en dos el alma.
No tendré compasión mientras me froto sobre tu cuerpo.
Te mataré a golpes de besos,
a golpes de orgasmos,
no me jactaré de lamerte hasta los huesos.
Rasguñaré tu espíritu,
morderé tu corazón,
te arrancaré la vida,
acabarás de morir en mi piel.
Guardaré tu sangre en un frasco,
beberé unas gotas cuando te extrañe
y en una botella de perfume
guardaré mis lágrimas con traumas,
para luego dártelas a oler.
Morirás en vida.
Pagarás…
por haberme denigrado…

Agónica

Ella ya no sangra,
el tour por sus venas se ha estancado,
su dermis ya no brilla junto al sol.
Ella está muerta…
Ella ya no llora,
fenecieron sus lágrimas,
sus ojos ya no parpadean.
Ella está muerta…
Ella ya no sufre,
se agotaron sus fuerzas,
sus labios ya no cantan.
Ella está muerta…
Ella ya no ríe,
se ha sellado su boca,
sus latidos al compás del reloj sólo indican…
que ella está muerta… ¿Muerta?...
Ella ya no cree,
se han acabado sus esperanzas,
su imagen ensimismada sólo refleja…
que ella está muerta…
Ella está muerta sí…
Muerta…
Muerta…
¿Quién la mató?...

16.2.10

CARMEN ROSALES VERA

Profesora, autodidacta de las letras. Nace en Santiago en 1971. Se define como una poeta contemporánea que juega con el contenido, el manejo del léxico y los diálogos. Sus lecturas principales han sido la mitología griega y celta, los poetas de la generación del 27 y el irlandés William Buttler Yeats, entre otros. En 1994 su examen de título, dirigido por el profesor, escritor Manuel Alcídes Jofré, consistió en una recopilación de todos los poemas publicados en Chile durante los años 1970-1973, en contraste con todo lo que se había registrado como propiedad intelectual en el campo de la poesía chilena de ese período.

CONVERSACIONES CON MI ESPEJO

¿Un reflejo que se desvanece?
¿Un reflejo que gira sobre su propio eje?

¿Un reflejo cansado de mirar los rótulos?
¿Un reflejo enamorado de sí mismo?

Un canto triste
se apodera de mis horas
es tan frágil ser espejo, Arianna,
es tan sutil la distancia
entre los dedos y tu reflejo.

Me llamas
desde el espejo
deseos de abandonar todo
para ir a ese mundo
en que todo se mide al revés

¿Un reflejo secuestrado de una revista?
¿Un reflejo que proyecta sombras?

Una tarde deliciosa,
esconderse en la alberca con agua tibia
y añorar el juego de peces
¿recuerdas?
cómo mi corazón latía frente a tu mirada severa
cómo mis lágrimas se secaban con tu risa
cómo jugábamos a ser estatuas de mármol?
<>¿un reflejo es un reflejo?
¿Un reflejo escondido en mi retina?

Una noche
frente a ti
descubrí mi hermoso cuerpo
reflejado
era pálido
azucarada las mejillas
los labios encendidos
me habían besado
era mi primer beso
Tú te reíste
dijiste que no sería la última vez
y claro
no lo fue...

¿reflejo de miradas enamoradas?
¿reflejo de muchacha con el torso desnudo?

Me casé
¿lo recuerdas?
te trisaste
y ocultaste el rostro
para fingir las lágrimas,
yo malinterpreté tus lágrimas
supuse un adiós
una lluvia de adioses
un trueno en mis oídos
no me percaté que también
lloraba
Y esa noche me alejé
para recorrer el mundo...

Sé que sigues ahí
frente al descanso de la escalera...
no obstante,
sé que no me esperas

¿un reflejo se quiebra cuando
se da cuenta que está enamorado?
¿un reflejo calla cuando sabe
que ha olvidado a quien amaba?

He sido feliz,
desde que te dejé esa tarde
he visto soles y lunas
y he decorado mi vida
con las dulces luces otoñales
Dime
y
tú, espejo
¿Aún sigues amando todos los reflejos?

LA VENGANZA

Escogiste el número más sagrado y misterioso
y te colgaste durante nueve días
y nueve noches para obtener sabiduría
Me señalaste que así obtendrías poder y conocimiento
una prueba a tu evolución
y yo sentí como el granizo se descargaba sobre mis hombros
destruyendo mis siembras
todo porque deseabas reconocer
el misterio de tu historia personal
entregándote a la mística sensación
de tu re-encuentro...

Tal vez el veneno lo portaba yo
en el cúmulo de sensaciones que embargaban mis sentidos
tal vez mostré mi parte oscura
sin medir los sacrificios
con las manos abiertas
y los pies bien plantados
seguí mi sino
y comencé mi deambular
permaneciendo en movimiento como las olas
con el odio alojado a mi costado

Supliqué a los cielos
con mis manos de sangre
enarbolando mi venganza
al borde de los límites
mi locura enhiesta
mi cordura pisoteada

*
Podrías acercar tus labios,
Podrías acercar tus manos
Y trepar por mi vida
Como la hiedra trepa por las piedras...
Podrías detenerte frente a mi ventana
Y obsequiarme un beso desde los cristales
O simplemente detenerte y hacer que el tiempo
Y sus brújulas dirijan sus manecillas hasta donde yo me encuentre...

Tan sólo eso, espero...
Un amanecer que encienda mis mejillas,
Un amanecer en el cual mirarme y hundirme...
Eso espero...
Espero que tú un día me cubras los ojos con tus manos
Y detengas las horas,
Los días
Y las semanas...
En una esquina cualquiera,
En una calle anónima,
Tú te acerques
Y me sorprendas,
Me sorprendas con tu presencia
Y recortes para mí las estrellas que hoy se niegan a mirarme...

Tan sólo eso espero...
Espero que te confundas con mi aroma,
Que caigas a raudales sobre mí como la lluvia
Y que nos confundan en las calles,
Que nadie sepa dónde termina mi vida
Y comienza la tuya,
Que nadie pueda distinguir de qué hilos estamos cosidos...
Tan sólo espero que puedas besar mi sombra y ser una con ella...

Espero todos los días que amanezca y te duermas en mí...